El técnico gallego se incorporará al Vizela portugués con el objetivo de lograr la permanencia en la primera división
19 dic 2023 . Actualizado a las 10:49 h.Tres meses después de aceptar el cargo, Rubén de la Barrera anunció su marcha de la selección nacional de El Salvador, con la que no ha ganado un partido. Sin embargo, lo hace para emprender una nueva etapa más ilusionante: dirigir en una liga europea. «Recientemente se pone en contacto conmigo un club de Primera División de una liga importante y me transmite el deseo de contar conmigo. A mí me han convencido por tratarse de una liga élite en Europa», apuntó el técnico coruñés en la rueda de prensa.
Aunque De la Barrera no anunció su siguiente destino, medios salvadoreños apuntan a que se trata del Vizela, un club de la Primeira Liga donde se encuentran el excéltico Toni Dovale (director deportivo) y el vigués David Blanco (analista de rendimiento). El equipo del norte de Portugal, que busca salvar la categoría, ocupa la penúltima plaza con tan solo dos victorias en las 14 jornadas disputadas.
En su comparecencia de despedida, el gallego indicó que «uno siempre intenta llenarse de motivos y de razones para que, sea cual sea el desenlace de esta decisión, realmente sientas con el paso del tiempo que ha valido la pena, y por eso doy el paso con esa esperanza». Añadió que su decisión tenía que ver con la posibilidad de retarse a sí mismo en una liga de primer nivel.
Tres equipos en seis meses
Esta nueva etapa supone un nuevo cambio radical para el preparador coruñés, que en seis meses habrá pasado por tres banquillos diferentes. El consejo de administración del Dépor presentó su renuncia al tiempo que destituía a De la Barrera el pasado 15 de junio. Hacía tan solo un mes que había regresado a la entidad coruñesa con el objetivo de enderezar el rumbo del equipo, pero con tan poco margen para trabajar no logró evitar el desastre y el cuadro blanquiazul se despidió de sus opciones de ascender a Segunda en el play off en Castellón. «Soy coruñés. Yo al Dépor vuelvo una, dos y 23 veces», dijo tras su salida.
Después de unos meses decidiendo qué nueva aventura comenzar, en septiembre se trasladó a El Salvador para entrenar, por primera vez, a una selección. Durante su corta etapa ha dirigido un total de cuatro partidos, pero no ha conseguido llevarse la victoria en ninguno, alargado la racha del combinado salvadoreño de más de un año sin ganar.
Ahora, todo hace indicar que recalará en el Vizela para emprender su primera experiencia en un equipo portugués y la tercera con un conjunto de una liga internacional —en el 2018 se marchó al Ah Ahli de Catar y, desde ahí, al Viitorul rumano—. Llega con el reto de salvar al equipo del descenso. Y lo hace un paso más cerca de A Coruña. Poco menos de 300 kilómetros separan ambas ciudades.