El Cemma contabiliza 300 en lo que va de año, la gran mayoría delfines
10 abr 2024 . Actualizado a las 01:13 h.«Non damos abasto. Este ano estamos a ter cifras altísimas de varamentos», indica el biólogo de la Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos Mariños de Galicia, Cemma, Alfredo López. El 2024 está empezando como acabó el 2023, con un ritmo de varamientos más alto de lo normal. Llevan a día de hoy cerca de 300 animales recogidos, mientras que la media de los últimos años era de 256. Si continúan a este ritmo será un año de récord, incluso superior al 2023, que cerró con 714. Lo que supone dos animales varados por día y las cifras «máis altas do sur de Europa».
¿A qué se debe? «Non o sabemos», reconoce el biólogo. El Cemma, con sede en Nigrán, cuenta con cinco trabajadores y un grupo de voluntarios que a este ritmo de trabajo no parecen suficientes. «Por desgraza, non temos tempo de poder analizar os datos con profundidade», indica. Recorren la costa de Galicia para detectar los varamientos, prestar los primeros auxilios a los animales que estén vivos. También se encargan de su posterior hospitalización, tratamiento y alimentación. Además, en el caso de fallecimiento practican autopsias para identificar las causas de la muerte del animal. A día de hoy, además de responder al alto ritmo de varamientos, también están a cargo de la recuperación de siete tortugas.
¿Alguna hipótesis? «Estes meses adoitan ter moitos varamentos polo mal tempo, a mala mar trae máis animais ás costas, pero non a un nivel tan alto», indica López. La respuesta puede que esté en las causas de su muerte. La mayoría de los animales que están apareciendo en las playas son delfines comunes. «O 70 ou 80 % morreron por capturas accidentais», indica el biólogo del Cemma. Explica que en su gran mayoría eran ejemplares sanos que mostraban «feridas por instrumentos de pesca como as redes». Esta fue, aparentemente, la causa de muerte de gran parte de los ocho delfines varados en las playas de Vigo en solamente cuatro días del mes de marzo. Por ejemplo, dos ejemplares que vararon en Cíes «chegaron atados pola cola». No es poco común. Lopéz indica que fueron víctimas de una captura accidental. «Deberon atópalos mortos e atáronos un cabo ás colas para sacalos das redes». Casos como este pueden indicar que «pode que os golfiños e outros animais mariños teñan que acercarse cada vez máis as costas para buscar alimento». Cuanto más cerca, más peligro. Esto se nota especialmente en verano.
Las cifras del año pasado también presentan una tendencia similar. Casi nueve de cada diez animales varados en el 2023 eran cetáceos. De 715, 450 fueron delfines comunes y «máis do 40 % presentaba indicios de morte por captura accidental en faenas pesqueiras». Estas cifras puede ser aún mayores, ya que muchos de los ejemplares que llegan a las playas no se pueden analizar por su avanzado estado de descomposición. Después de los delfines, los animales que más varan en Galicia son las tortugas marinas (un 3,5 %), los lobos marinos (1,7 %), nutrias (1,4 %) y pescados (7,1 %). De estos animales varados en el año pasado, 57 «foron rexistrados con vida», una cifra muy alta, pero que también se debe a las cifras «desorbitadas» de llegadas a las playas. 46 de estos ejemplares vivos fueron reintroducidos en el mar e «sobreviviron na maior parte dos casos».
En Galicia, Ribeira es el lugar que registra más varamientos, pero superan los 20 anuales: Vigo, Fisterra, Sanxenxo, Carnota, Porto do Son, Ferrol, O Grove, Muros y Malpica. Esto se debe a que «normalmente os concellos que rexistran un maior número ao son os que se atopan nas bocas da ría. Cara adentro vai descendendo o número».