Más de 40 familias de Vigo están a la espera de ser desahuciadas por impago

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

Oscar Vázquez

El padre que se tiró desde una ventana negoció sin éxito minutos antes una prórroga de su desalojo por impago. La expulsión quedó suspendida tras el incidente.

05 may 2024 . Actualizado a las 01:56 h.

El inquilino de 43 años, padre de dos hijos, que se tiró el jueves por la ventana en Vigo delante de la comisión judicial que iba a desalojarlo por impago del alquiler iba a ser una más de las 78 familias que fueron desahuciadas en el primer trimestre. A uno de abril quedaban 12 familias en lista de espera pendientes de expulsión y ahora se suman otras 30 nuevas. Paradójicamente, este es el año con menos expulsiones desde 2016.

Este parón en los desahucios se explica porque, por un lado, el Gobierno ha implementado medidas de protección para las familias vulnerables que no privarlas de un techo, lo que reduce las expulsiones de viviendas, y, por otro, los caseros son más cautos y no ponen en alquiler tantos pisos por miedo a los okupas. Al reducirse la oferta, hay menos impagos.

El progenitor había conseguido varias prórrogas e intentó una más. Por ello, imploró sin éxito minutos antes a los funcionarios judiciales de Embargos y a la procuradora de su casera para que le concediesen otra prórroga y aplazasen la expulsión de su familia. Según los vecinos, sus dos hijos menores estaban en el colegio y su mujer en la vivienda. Tras precipitarse al vacío y ser hospitalizado, la comisión judicial, todavía conmocionada por el primer incidente que registran de este tipo en su historia, suspendieron la diligencia del lanzamiento (desalojo) y no llegaron a entrar en el piso.

En Vigo, se presentaron 163 demandas de desahucio contra arrendatarios y ocupantes en precario en el primer trimestre del año. Hubo 543 en el 2023. Entre enero y marzo, el Servicio Común de Notificaciones y Embargos recibió 91 órdenes de lanzamiento (desalojo) en la ciudad y ejecutó 78. Suponen un desahucio al día. El techo de demandas de desalojo en Vigo se alcanzó en el 2019, con 695 expedientes.

La comisión judicial devolvió las actuaciones del caso de la calle Álvaro Cunqueiro al juzgado dando cuenta de la caída del inquilino. Por su parte, el Juzgado de Instrucción número 6 de Vigo, en funciones de guardia, recibió ayer el parte de lesiones por tratarse de un hecho acaecido durante una actuación judicial.

El inquilino salió ese mediodía al portal al encuentro de la comisión judicial integrada por funcionarios de Embargos, una procuradora y un cerrajero. El deudor intentó una negociación para retrasar el desalojo de él y su familia pero la representación de la propietaria no accedió a más aplazamientos. Entonces, el hombre pidió que lo esperasen porque quería subir al piso «a hacer unas cosas». Lo acompañaron en ascensor hasta el cuarto piso, donde vivía. Los funcionarios y la procuradora se quedaron en shock. «Él ya sabía lo que había. Intentó hablar con la procuradora que representaba a la propiedad, nos estaba esperando en el portal, pidió un plazo más de prórroga pero ella se opuso, la casera no estaba de acuerdo. Le dijeron: 'Tiene que irse'. La comisión judicial subió en ascensor con él, se abrieron las puertas, él salió en otra dirección, abrió una ventana y se tiró para sorpresa de todos. No nos advirtió de nada. Nadie se esperaba algo así», relatan fuentes judiciales.

«É a punta do iceberg dunha crise»

Diversos colectivos y partidos políticos reaccionaron ayer al intento de suicidio del vecino que iba a ser desahuciado y que ven como el trasfondo de una realidad alarmante con un desalojo al día por impago. «É só a punta do iceberg dunha crise de vivenda que afecta a miles de personas na nosa cidade e en todo o país», dice el Sindicato de Inquilinas Vigo. Tienen un recuerdo para la madre y los tres hijos fallecidos en la calle Alfonso X el Sabio en octubre, «unha lembranza dolorosa das consecuencias devastadoras da neglixencia e a indiferencia cara á crise de vivenda». Exigen construir vivienda pública, movilizar pisos vacíos, regular los inmuebles turísticos y montar un parque público de vivienda de alquiler.

El foro socioeducativo Os Ninguéns se concentró ayer por la tarde en la calle Privada Moderna para reclamar un parque social de vivienda en la ciudad. Exigieron que los pisos no ocupados y tapiados pasen a formar parte de un parque social y pidieron a la Xunta y al Concello que negocie con la Sareb para conseguir esas viviendas para los vecinos que lo precisen. La iniciativa fue secundada por el portavoz municipal del BNG de Vigo, Xabier Pérez Igrexas, y la diputada en el Parlamento gallego, Alexandra Fernández.

También Podemos Vigo mostró su «consternación» por el suceso del hombre que se arrojó por la ventana. «Dóenos profundamente saber que alguén se vexa empuxado ao bordo do abismo pola desesperación de perder o seu fogar», dicen. Califican el hecho como «un berro desesperado». Podemos exige crear un parque público de vivienda digna y segura. Partidos y organizaciones sociales inciden en los altos precios del alquiler.