El Deportivo suspendió la visita al Concello ante las trabas al convenio para Riazor

La Voz REDACCIÓN

TORRE DE MARATHÓN

Celebración del ascenso del Dépor Abanca en el Ayuntamiento
Celebración del ascenso del Dépor Abanca en el Ayuntamiento Eduardo Pérez

El club advierte que la negativa municipal al acuerdo para el uso del estadio amenaza su participación en el fútbol profesional

14 may 2024 . Actualizado a las 10:49 h.

El Deportivo aplazó este lunes su visita al palacio de María Pita y advirtió que la demora de la firma de un convenio para el uso del estadio de Riazor pone en peligro su participación en el fútbol profesional. El Concello de A Coruña se alejó del club en los últimos años y desencadenó, en plena ola de entusiasmo por el ascenso, una situación atípica en el fútbol español, y que la afición confía en que se desbloquee, como pidió la Federación de Peñas. El Deportivo suspendió la visita al palacio municipal, que había llegado a anunciar el gobierno local de Inés Rey para la tarde de ayer, «a la espera de la solución de todas las solicitudes realizadas en los últimos tres años».

Una relación que no es idónea

El Deportivo utiliza el estadio municipal en virtud de un convenio firmado en el 2000 y que expira en el 2025. En un comunicado publicado a última hora de la mañana, el club indicó que «considera que la relación actual entre el RC Deportivo y el Concello no es la idónea para celebrar una visita de estas características», y dejó para la tarde un escrito más amplio en el que señalaba los peligros a los que le expone la ausencia de un convenio a largo plazo para el uso de Riazor. El anuncio llega después de que el gobierno local demorase la firma de un documento para la cesión de uso del estadio municipal que el Deportivo había dado por aprobado por Inés Rey en enero, a falta de la posible introducción de algún posible ajuste de carácter técnico tras la revisión del documento por la asesoría jurídica.

El requisito de la Liga

Desde enero, el asunto quedó paralizado, hasta que el domingo, en el estadio, con motivo del partido del ascenso, la alcaldesa fijó el 30 de junio como fecha límite para la firma del convenio, un nuevo aplazamiento que el club no ve razonable. Por eso aplazó ayer su visita a María Pita, al sentirse engañado. El Deportivo explicó por la tarde el peligro al que se enfrenta si no cierra un convenio «imprescindible para garantizar el futuro del club en la categoría de plata del fútbol español». Y desgranó el perjuicio que supone la falta de un acuerdo.

«La Liga precisa un certificado de uso y disfrute del estadio que debe emitir el Concello para la temporada 24/25. Además, la no disponibilidad a largo plazo del estadio pone al club en una situación de precariedad e incertidumbre», indicó en referencia a que la amortización de cualquier inversión en la instalación se vuelve insostenible en el cortísimo plazo que resta para expirar el convenio actual: «Supone también un problema financiero para el Dépor, pues todas las inversiones en mejora y modernización del campo necesarias deben ser amortizadas a 15 meses y no en varios años, como sucedería con un convenio. Una situación así podría afectar incluso en la existencia de recursos financieros suficientes para los fichajes».

Las conversaciones para un acuerdo se rompieron hace un año, cuando el gobierno local fijó como imprescindible que el Deportivo pagase por el uso del estadio, dado que, entre otras cuestiones, comercializaría su denominación, aunque ya viene denominándose Abanca-Riazor desde el 2017, con Xulio Ferreiro como alcalde.

Con la refundación del club el pasado verano y la renovación de prácticamente todos sus cargos directivos, el Deportivo accedió, ya con Álvaro García Diéguez como presidente, al pago de un canon por el uso del estadio, algo que no había sucedido nunca antes. La concesión por parte del club pretendía facilitar el diálogo y desbloquear el acuerdo, tal y como dio por cerrado el pasado enero porque «el Concello ha trasladado en varias ocasiones al club que está de acuerdo con ese borrador, pero de forma reiterada sigue sin ejecutar la firma del mismo sin razón aparente».

Pago de 400.000 euros

El Deportivo pagaría 400.000 euros por el uso del estadio si juega en Primera y 200.000 en Segunda. Ayer, el club hizo público «en aras de la transparencia» el borrador enviado al gobierno local, «en el que el Dépor ha accedido a todas las peticiones hechas por el Concello, incluyendo pagos de arrendamiento que nunca antes en la historia del club se habían realizado».

El Deportivo acudió a la recepción municipal a su equipo femenino por el reciente ascenso hace dos semanas. Pero luego constató que continuaba el bloqueo del convenio y lamentó que Inés Rey anunciase la instalación de una fan zone junto al Palacio, con pantallas gigantes para seguir el partido del ascenso, cuando el evento lo organizaba y pagaba el club.

El equipo estuvo durante la noche del domingo muy cerca de su afición, tanto en la fiesta en el propio terreno de juego, como en la velada posterior en el palco de la explanada del Palacio, donde el club había dispuesto una pantalla gigante para seguir tanto su partido contra el Barcelona Atlètic como el encuentro del Leyma por el ascenso a la ACB el pasado sábado.

Además, su intención es organizar una gran jornada de celebración del regreso a Segunda, en Cuatro Caminos, el emblemático punto de encuentro de la afición, el 25 de mayo, fecha del último partido de Primera Federación y, ese mismo día, montar una fan zone, «en María Pita u otra ubicación que permita el gobierno local, con el fin de que la ciudad pueda seguir disfrutando del logro conseguido por la plantilla».

Inés Rey lamenta la ausencia en la recepción

El gobierno local de Inés Rey lamentó ayer la «decisión unilateral da propiedade do Dépor» de no acudir a la recepción en el palacio municipal. «O Dépor é de todos os coruñeses e coruñesas e merecen poder felicitar ao equipo na praza de María Pita como sempre se fixo nas grandes ocasións na historia do club (...). O goberno local considera intolerable que se impida aos deportistas gozar do recibimento que merecen por intereses económicos que nada teñen que ver co deporte».

El gobierno local manifestó su «vontade» de alcanzar un acuerdo para el nuevo convenio, pero entiende que «a empresa propietaria do club, Abanca, esixe ao Concello a entrega total e gratuíta dun ben público para a súa explotación económica e comercial en exclusiva máis alá do ámbito deportivo».

«Lamentamos que en un día tan esperado por todos los coruñeses, la falta de diálogo de Inés Rey haya provocado que el Deportivo haya declinado acudir a la recepción oficial en el Ayuntamiento, tras haber sido recibidos tanto por la Xunta como por la Diputación», apuntó el portavoz del grupo del PP, Miguel Lorenzo, que culpa de la situación a la «falta de diálogo» de Inés Rey.

«As diferenzas suscitadas entre o goberno local e o Deportivo arredor do convenio que regula o uso do estadio municipal de Riazor non deberían ter impedido a presenza do equipo neste acto», valoró el BNG, socio de investidura del gobierno, que lamentó «a ausencia do Deportivo na recepción institucional». Y pidió transparencia a ambas partes.

El club pagará por el uso del campo, pero se mantienen dos puntos de discrepancias

El convenio para el uso de Riazor quedó cerrado en enero, según el Deportivo, después de las últimas reuniones. Fuentes municipales indicaron ayer que existen varios desencuentros. El primero radicaría en la duración del acuerdo, que está fijado en 40 años en el documento que envió el Deportivo al Concello y el gobierno local quiere reducir a 25.

Otra discrepancia nacería del uso del estadio. En el documento publicado ayer por el Deportivo, que incluye el pago de una contraprestación económica en función de si milita en Primera o Segunda, recoge también que «el Ayuntamiento de La Coruña se reserva el derecho de utilización del estadio para la celebración de cualquier acto deportivo, o extradeportivo, de carácter local, autonómico, nacional o internacional, siempre que dicha utilización sea compatible con los compromisos derivados de competiciones oficiales en las que intervenga el Real Club Deportivo de La Coruña y no generan perjuicio a este, debiendo comunicar dichos actos con la antelación suficiente para conocimiento del club».

El gobierno local asegura que el Deportivo exige la cesión total de la instalación, no solo para el uso deportivo, sino para la organización de otro tipo de eventos, algo que no acepta.

El pago del canon de 400.000 o 200.000 euros que recoge el convenio enviado por el Deportivo se contemplaba que se destinase a instalaciones deportivas de la ciudad, unas inversiones que se irían comprobando a través de una comisión de seguimiento.

El gobierno local considera que debe incluirse una cláusula que impida la venta del Deportivo a un inversor ajeno a la realidad de la ciudad, como una manera para evitar la especulación con el club. Un punto que desde la entidad de la plaza de Pontevedra dicen desconocer por completo.

Mientras, el presidente de Abanca, Juan Carlos Escotet, trasladó ayer de forma rotunda a la plantilla de jugadores del Deportivo, en la recepción realizada por la tarde, que no entra en sus planes vender la entidad.

Además, el club también lamentó ayer que «desde hace dos temporadas el Concello no colabora de forma comercial con el Deportivo para promocionar y promover el turismo en la ciudad de A Coruña, aunque el club esté dispuesto a colaborar, como sucede de forma recurrente con Xunta de Galicia y Diputación de A Coruña».